Plataforma para la FM y SFC
La soledad de estos pacientes aboca a que los tratamientos que se prescribieron en su día, sean abandonados precisamente porque no hay seguimiento de la cronicidad. Estos pacientes buscan soluciones pero encuentran barreras que impiden avanzar conjuntamente a sanitarios y enfermos.
Es entonces cuando el paciente de estas patologías en su propia investigación, decide que, si no es entendido ni atendido, buscará por propios medios fuentes de las que sustanciar el cuidado de su enfermedad.
Pero a este paciente le faltan recursos para poner en marcha un seguimiento científico, medible y constatable para su historia clínica. El paciente bandea, choca y se confunde o es confundido por medios inaceptables para su dolencia.
Aunque padezca otras comorbilidades, hipertensión, problemas cardíacos, abdominales, psicológicos, neurológicos, de aparato locomotor, etc. sólo es atendido de la patología concreta sin simultanear multidisciplinarmente los síndromes.
Así su periplo de soledad pasa por las diferentes consultas independientes sin hacer constar en las historias médicas que padece estos síndromes negando la credibilidad de ellas, negando e ignorando que el paciente sufre en esta negación.
En ello, los sanitarios obvian lo que el paciente quiere trasmitir, desea y preocupa y que a veces es él mismo quien lo oculta por su descrédito como enfermo y como patologías desconocidas como enfermedades crónicas.
Es así como el paciente entró en las redes sociales de autoayuda, se automedica, abandona o toma más o menos de las prescripciones de los facultativos constituyendo un grave peligro para la salud ser paciente POLIMEDICADO, pero paciente no controlado.